Guatemala tiene algo más que iglesias y volcanes, y
el lago Atitlán, a cuyo alrededor se amontonan los puestos de recuerdos
turísticos; algo más que las pirámides de Tikal y floracíon perpetua.
un 85% de sus habitantes sufren pobreza, y de ellos un 60% se encuentra
en la miseria absoluta. El 63% de la población es ananfabeta. La
esperanza de vida del indio es de 49 años; la de la mujer india, 47. Eso
en el caso de que no los maten antes: “nuestro oro, nuestro petróleo
son los indios. Nuestra mano de obra barata es nuestra riqueza. Grandes
fortunas se han amasado por el procedimiento de quitarles la tierra a
los indígenas y ponerles a trabajar a un dólar por cada día. Aún ahora
hay haciendas donde se les entrega, por todo salario, un vale que
cambian por frijoles y alcohol que es puro veneno. Muchos militares son
también dueños de la tierra: han pasado de proteger la riqueza a ser
socios en el negocio. Tecún Umán es el último refugio. Todo lo que no
quiere los Estados Unidos se queda en México, y todo lo que México no
quiere se queda allí. Es, en verdad, una ciudad fronteriza. Los espaldas
mojadas trataban de cruzar el río a México.